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¿Buscás crear sentido de pertenencia y una mejor imagen de marca? Fomentar la cultura organizacional es la respuesta para esos objetivos.
Muchas de las situaciones problemáticas que se generan internamente en una empresa están relacionadas con fallas en la cultura oganizacional. Caso contrario: cuando los empleados se sienten parte, traen soluciones inmediatas.
Asimismo, en numerosas encuestas de satisfacción de clientes figura el reconocimiento de la coherencia en los servicios recibidos. Y solo una cultura organizacional sólida facilita esa visión de conjunto.
Entonces, ¿qué es la cultura organizacional y cómo desarrollarla con éxito? Vamos a descubrirlo en el siguiente artículo.
La cultura organizacional es el conjunto de valores, hábitos y experiencias que unifica a los miembros de una empresa. Comprende tanto la dinámica formal como informal de la institución.
Su importancia recae en dos dimensiones:
Es importante capacitarse en cultura organizacional para poder fomentarla en tu lugar de trabajo y apuntar a puestos de gestión. Los cursos de ESEP incluyen este tópico de manera teórica y práctica.
La cultura organizacional puede estar formada por buenos hábitos de trabajo o por otros no tan favorables. Por ello, es importante seguir algunos tips para consolidar y mantener una cultura organizacional saludable.
¿Cómo se logra una cultura organizacional saludable y positiva? Veamos qué hace un líder estratégico:
Ciertos rasgos de la cultura organizacional pueden surgir de forma inconsciente. Pero mientras más consciente puedas hacer estos objetivos y modos de actuar de tu empresa, más coherencia lograrás para con tus clientes.
Por ello, capacitarse en cultura organizacional es un plus en todo modelo de gestión que se quiera impulsar en una empresa. Entonces, ¿querés saber cómo fomentar y acrecentar una cultura organizacional positiva?
Una cultura organizacional saludable se vale por los méritos y no por los castigos. Otorgar a los empleados premios y reconocimientos por su buen desempeño es una práctica recomendable.
Click to Tweet: El sostén de la cultura organizacional de tu empresa son los recursos humanos. Los empleados son los que hacen visible a la institución.
Dar reconocimiento genera un buen clima de trabajo y una calificación positiva en la expectativa sobre puestos vacantes. Y sin caer en el cliché, vale la frase: “empleado contento, cliente satisfecho”.
La cultura organizacional responde a la mecánica del contagio. Los empleados se retroalimentan entre sí ante estímulos positivos, ante líderes innovadores.
Apoyar el talento personal para impulsar una cultura organizacional saludable implica escuchar a los empleados, fomentar una comunicación abierta y compartir ideas innovadoras.
Como señalamos, si bien la cultura organizacional implica aspectos visibles e invisibles de la empresa, como líder podés direccionar hacia actitudes saludables. Para lograrlo, uno de los medios es la capacitación continua del personal.
Click to Tweet: Grandes empresas implementan la capacitación continua desde hace años y es una de sus claves de éxito en el mercado.
Las capacitaciones pueden ser internas o externas. Muchas veces, estas son muy bien recibidas por su profesionalismo y mirada crítica.
En ESEP también es posible contratar capacitaciones para empresas, ya sea con modalidad online o presencial. No dudes en consultarnos, encontrarás la información que necesitas en nuestra página web.
Los planes de desarrollo profesional implican la división de la empresa en puestos de trabajo diferenciados, con posibilidades de crecimiento laboral. También comprenden el punto anterior de capacitación continua.
Por otro lado, en un plan de desarrollo profesional se dan premiaciones y aumentos salariales según tareas cumplidas e ideas innovadoras. Esto tiene en cuenta los tiempos de trabajo y la efectividad de producción.
La perpetuidad en una tarea, sin especialización laboral ni posibilidad de crecimiento, suele generar desgaste en el personal. Pero además propicia una cultura organizacional perezosa, lo que está en las antípodas de los hábitos saludables.
Es importante comprender que en el ámbito empresarial el liderazgo nada tiene que ver con ocupar un puesto de trabajo autoritario, con dar órdenes a otros. La capacidad de liderazgo es una competencia laboral que habla de autonomía e innovación.
Se es líder cuando se logra empatía con otros, división de tareas y toma de decisiones positivas a futuro. Los líderes pueden trabajar en equipo y solucionar situaciones problemáticas. Además, saben delegar y tienen un estilo de comunicación efectivo.
En este sentido, una empresa de líderes sociales, no de jefes ni empleados, es la que logra una cultura organizacional saludable.
Fomentar un estilo de cultura organizacional saludable apunta al reconocimiento y el crecimiento positivo de los recursos humanos. Si pensamos que “como es adentro es afuera”, es difícil imaginar una empresa exitosa que no vea en sus colaboradores su principal estrategia de mercado.
Ahora bien, una cultura organizacional positiva no se logra por defecto, sino que se construye a partir de una serie de hábitos saludables que la potencian:
En ESEP, contamos con cursos de capacitación personales y para empresas. Creemos que es posible la capacitación continua en favor de la cultura organizacional. ¡Consultanos!
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